María O’Higgins en el presidium de la presentación del catálogo Humanidad recuperada. Magdalena Ojeda, presidenta del DIF Michoacán, asistió como invitada especial
Foto: Cosme Vargas
Texto: La Jornada Michoacán
Fueron seleccionadas por la viuda del artista estadunidense nacionalizado mexicano
Reúnen obras de Pablo O’Higgins en el catálogo Humanidad recuperada
Los vínculos del artista con Michoacán trascienden en muros de edificios públicos del estado
CARLOS F. MARQUEZ
La Jornada Michoacán, 9-05-2008
Reúnen obras de Pablo O’Higgins en el catálogo Humanidad recuperada
Los vínculos del artista con Michoacán trascienden en muros de edificios públicos del estado
CARLOS F. MARQUEZ
La Jornada Michoacán, 9-05-2008
En murales como la Expropiación Petrolera u obras en las que aborda el problema de la alfabetización o la miseria de la clase trabajadora es que Pablo O'Higgins sigue vigente como ideólogo de un arte comprometido con el acontecer social, manifestó su viuda María O'Higgins a propósito de la presentación del catálogo Humanidad recuperada, el cual reúne 30 obras gráficas en las que el artista demuestra que los cimientos de México como nación se encuentran en los obreros, campesinos y mujeres indígenas afanados en la construcción de mejores posibilidades de vida.
Los vínculos que en vida tuvo Pablo O'Higgins con Michoacán trascienden a través de los trazos que dejó como herencia en varios muros de edificios públicos de nuestro estado, algunos de ellos desaparecidos, pero jamás olvidados. El artista nacido en Salt Lake City, Utah, y después nacionalizado mexicano por efecto de los procedimientos legales pertinentes y por virtud de su arte hermanado con las causas más nobles de nuestro pueblo, parece remontar con su obra el camino andado en nuestro estado, sólo que ahora lo hace a través de la gráfica y la Humanidad recuperada de la desmemoria a que parecen condenados los menos privilegiados.
En junio de 2007, el vínculo de Michoacán con Pablo O'Higgins fue reestablecido por iniciativa de Raúl Jiménez Lescas al frente de la Escuela Nacional de Trabajadores que impulsó la estadía de la exposición Humanidad recuperada en la Casa de las Organizaciones de la Sociedad Civil y el Voluntariado. Esta exposición se presentó posteriormente en el Ex Convento de Tiripetío.
A poco menos de un año, en el contexto del aniversario de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, se presentó ayer el catálogo que guarda la memoria de esa exposición en la que se presentaron 15 litografías, 11 litografías a lápiz, dos litografías en vidrio y dos obras en linóleum seleccionadas por María O'Higgins, viuda del artista y actual presidenta de la Fundación María y Pablo O'Higgins.
En el podium del Aula Mater del Colegio de San Nicolás, María O'Higgins se irguió “como un ciudadano más de México” para contemplar “un testimonio que Pablo nos deja del trabajo de todos los mexicanos”, y es que las obras de este artista son la bitácora de la construcción de una nación por el esfuerzo de campesinos, obreros industriales, pescadores y mineros, así como mujeres, ancianos y niños imbuidos en sus batallas cotidianas.
La viuda del artista dimensionó la importancia de la obra de O'Higgins a la luz de los acontecimientos actuales; sentenció que “su pintura mural es la relatoría de las luchas de los mexicanos, por lo que se confirma que en ella el artista está pensando en los destinos de los mexicanos”.
En una tentativa de dimensionar la naturaleza del artista Pablo O'Higgins, la directora del Ex Convento de Tiripetío, Greta Trangay, manifestó: “cada quien elige su manera de luchar y expresar las injusticias que están en la memoria viva del pueblo. Cada uno busca dentro de sí la vocación que lo conduzca a cumplir este propósito, aquel que la encuentra en el arte, dispara de su rifle un clavel haciendo brotar en aquellos que lo observan una conciencia nítida. Hablar de Pablo O'Higgins es rescatar y hacer oír la voz de los desposeídos, es levantar la frente para recordar a todos el honor de vivir en el lugar al que pertenecemos, es cobrar la capacidad de rescatar las profundas raíces de México; es, en fin, recorrer una parte de la historia de México… Su gráfica descubre esa parte álgida de la producción humana, pero siempre como un paisaje que engrandece el trabajo, la conciencia social y la vida de los hombres y mujeres”.
En la presentación del catálogo de la exposición Humanidad recuperada, estuvieron representantes de las instituciones involucradas en esta edición: Greta Trangay Vázquez, directora del Ex Convento de Tiripetío; César Durán, en representación de Eduardo Tena Flores, secretario general del Sindicato Unico de Empleados de la Universidad Michoacana; María O'Higgins, presidenta de la Fundación María y Pablo O'Higgins; Eréndira Herrejón Rentería, investigadora del Ex Convento de Tiripetío, y como invitada especial Magdalena Ojeda Arana, presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia en Michoacán.
Los vínculos que en vida tuvo Pablo O'Higgins con Michoacán trascienden a través de los trazos que dejó como herencia en varios muros de edificios públicos de nuestro estado, algunos de ellos desaparecidos, pero jamás olvidados. El artista nacido en Salt Lake City, Utah, y después nacionalizado mexicano por efecto de los procedimientos legales pertinentes y por virtud de su arte hermanado con las causas más nobles de nuestro pueblo, parece remontar con su obra el camino andado en nuestro estado, sólo que ahora lo hace a través de la gráfica y la Humanidad recuperada de la desmemoria a que parecen condenados los menos privilegiados.
En junio de 2007, el vínculo de Michoacán con Pablo O'Higgins fue reestablecido por iniciativa de Raúl Jiménez Lescas al frente de la Escuela Nacional de Trabajadores que impulsó la estadía de la exposición Humanidad recuperada en la Casa de las Organizaciones de la Sociedad Civil y el Voluntariado. Esta exposición se presentó posteriormente en el Ex Convento de Tiripetío.
A poco menos de un año, en el contexto del aniversario de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, se presentó ayer el catálogo que guarda la memoria de esa exposición en la que se presentaron 15 litografías, 11 litografías a lápiz, dos litografías en vidrio y dos obras en linóleum seleccionadas por María O'Higgins, viuda del artista y actual presidenta de la Fundación María y Pablo O'Higgins.
En el podium del Aula Mater del Colegio de San Nicolás, María O'Higgins se irguió “como un ciudadano más de México” para contemplar “un testimonio que Pablo nos deja del trabajo de todos los mexicanos”, y es que las obras de este artista son la bitácora de la construcción de una nación por el esfuerzo de campesinos, obreros industriales, pescadores y mineros, así como mujeres, ancianos y niños imbuidos en sus batallas cotidianas.
La viuda del artista dimensionó la importancia de la obra de O'Higgins a la luz de los acontecimientos actuales; sentenció que “su pintura mural es la relatoría de las luchas de los mexicanos, por lo que se confirma que en ella el artista está pensando en los destinos de los mexicanos”.
En una tentativa de dimensionar la naturaleza del artista Pablo O'Higgins, la directora del Ex Convento de Tiripetío, Greta Trangay, manifestó: “cada quien elige su manera de luchar y expresar las injusticias que están en la memoria viva del pueblo. Cada uno busca dentro de sí la vocación que lo conduzca a cumplir este propósito, aquel que la encuentra en el arte, dispara de su rifle un clavel haciendo brotar en aquellos que lo observan una conciencia nítida. Hablar de Pablo O'Higgins es rescatar y hacer oír la voz de los desposeídos, es levantar la frente para recordar a todos el honor de vivir en el lugar al que pertenecemos, es cobrar la capacidad de rescatar las profundas raíces de México; es, en fin, recorrer una parte de la historia de México… Su gráfica descubre esa parte álgida de la producción humana, pero siempre como un paisaje que engrandece el trabajo, la conciencia social y la vida de los hombres y mujeres”.
En la presentación del catálogo de la exposición Humanidad recuperada, estuvieron representantes de las instituciones involucradas en esta edición: Greta Trangay Vázquez, directora del Ex Convento de Tiripetío; César Durán, en representación de Eduardo Tena Flores, secretario general del Sindicato Unico de Empleados de la Universidad Michoacana; María O'Higgins, presidenta de la Fundación María y Pablo O'Higgins; Eréndira Herrejón Rentería, investigadora del Ex Convento de Tiripetío, y como invitada especial Magdalena Ojeda Arana, presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia en Michoacán.
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